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Hay cosas en la Biblia que el Cristiano común generalmente pasa de largo, no le interesa o simplemente se hacen de la vista gorda; un claro ejemplo de esto es lo que ocurrió con los Apóstoles inmediatamente después de la muerte y resurrección de Jesús coincidiendo con el inicio de libro de los Hechos.
En Hechos de los Apóstoles, los once discípulos elegidos por el Jesús resucitado, esperan en Jerusalén la iluminación del Espíritu Santo para realizar un sorteo con el objetivo de sustituir a Judas Iscariote, el desventurado. Ellos escogieron a Matías por encima de Barsabás Justo, restaurando así el círculo mágico de los 12 Apóstoles. La redacción utilizada en Hechos es curiosa: “uno sea hecho testigo con nosotros, de su resurrección” (Hechos 1,22). En esta etapa, los “Doce”, todavía tiene una importancia divina o mística.
Pero después de un interludio dirigido por Pedro (El sermón en Pentecostés, primeros milagros, el arresto y la detención de nuevo, etc) “los Doce” han dejado de ser útiles. La gran noticia es que los apóstoles no desean “servir a las mesas” (no es broma amigo lector, Hechos 6,2… aunque de seguro saldrá algún creyente alegando que hay que interpretar esa frase) o desatender a "las viudas griegas"… ellos quieren seguir adelante con la oración y el ministerio. Eligen siete hombres, lleno del Espíritu Santo, nombrados para realizar este trabajo sumamente mundano y frívolo. (Hechos 6,3-6)
Hechos 6,1-6
1 En aquellos días, como creciera el número de los discípulos, hubo murmuración de los griegos contra los hebreos, de que las viudas de aquéllos eran desatendidas en la distribución diaria.
2 Entonces los doce convocaron a la multitud de los discípulos, y dijeron: No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios, para servir a las mesas.
3 Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo.
4 Y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra.
5 Agradó la propuesta a toda la multitud; y eligieron a Esteban, varón lleno de fe y del Espíritu Santo, a Felipe, a Prócoro, a Nicanor, a Timón, a Parmenas, y a Nicolás prosélito de Antioquía;
6 a los cuales presentaron ante los apóstoles, quienes, orando, les impusieron las manos.
Lo que en realidad desmorona la "autenticidad" de esta historia es que a partir de este punto los discípulos originales Judíos son ahora libres para servir, y casi desaparecen totalmente de la historia. Por el contrario, los "helenistas", chicos nuevos, supuestamente designados para el trabajo social, son quienes se roban la atención (¿Alguien dijo Pablo?).
El primer paso lo da Esteban, que ofrece un gran discurso pre-mortem y se convierte en el primer mártir, seguido por Felipe (no confundir con el discípulo del mismo nombre) que funciona de maravilla en Samaria, en la competencia con Simón el Mago. Felipe también convierte el tesorero de Etiopía e incluso “desaparece” de Gaza para reaparecer veinticinco millas de distancia, en Azoto (Ashdod), todo esto por cortesía del Espíritu Santo (Hechos 8,39-40). Obviamente Felipe no pasó mucho tiempo trabajando en las mesas. Veinte y tantos años más tarde, Felipe se encuentra en Cesárea, donde es padre de cuatro vírgenes profetizas, y alberga al apóstol Pablo. (Hechos 21,8-9; nótese que ya Felipe no es tratado como uno de los 12, sino como uno de los 7, ratificando el cambio oficial del numero de discípulos)
Los otros helenistas integrantes del grupo de los 7 (Prócoro, Nicanor, Timón Parmenas, y Nicolás) nunca se volvieron a mencionar. Como la mayoría de los apóstoles con nombre, se limitan simplemente a completar el número. A partir de esta etapa los Hechos se han convertido totalmente en un monologo de las aventuras de Pablo.
Estos nuevos “7 Discípulos” elegidos, son llamados por los Creyentes Cristianos como “los 7 ayudantes” o los “7 diáconos”… una buena manera de disimular este extraño cambio de numero. Obviamente las explicaciones cristianas abundan desde extrañas simbologías hasta simples trabajos terrenales.
En cuanto a los Discípulos originales elegidos por Jesús “Los pescadores de hombres” a quienes se les ha ordenado divinamente llevar las buenas nuevas "a los confines de la tierra"… se han desvanecido en el olvido.
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Es absolutamente incomprensible la situación de los increíbles Doce Apóstoles después de la ascensión de Jesús. Pareciese que, incluso después de la ratificación del Jesús resucitado, cayeran en desgracia o en el olvido. Tres opciones: o bien estos 12 los apóstoles no fueron para nada importantes; o hubo una descarada manipulación de las escrituras queriendo ocultar las actividades de estos apóstoles ; o simplemente no existieron y son solo nombres y números creados para darle a la iglesia cristiana primitiva un apoyo astrológico-religioso (12 apóstoles -12 tribus de Israel – 12 signos zodiacales)… en todo caso estos “Apóstoles” quedan muy mal parados.
Los Apóstoles pasaron en el libro de Hechos de 12 a 7 y luego finalmente a uno solo apóstol (Pablo)… con la falta de apoyo histórico, al parecer los 12 apóstoles iniciales eran totalmente prescindibles. ¿Manipulación Bíblica? Bastante probable… ¿Totalmente inventado? Muy pero muy posible.
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Fuentes:
David Farmer, Oxford Dictionary of Saints (OUP,1997)
Edward Gibbon, The Decline & Fall of the Roman Empire (1799)
Michael Walsh, Roots of Christianity (Grafton, 1986)
Ver: La Farsa de los 12 Apóstoles
Ver: Jesús no Existió. Introducción.
Ver Artículos sobre: Jesús
Ver Sección: Análisis Bíblico.
“Cada vez que se encuentre usted del lado de la mayoría, es tiempo de hacer una pausa y reflexionar” Mark Twain
jo, Señor nuestro; que fue concebido del Espíritu Santo, nació de la virgen María, padeció bajo el poder de Poncio Pilato; fue crucificado, muerto y sepultado; descendió a los infiernos; al tercer día resucitó de entre los muertos; subió al cielo, y está sentado a la diestra de Dios Padre Todopoderoso; y desde allí vendrá al fin del mundo a juzgar a los vivos y a los muertos.
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